Los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del último trimestre del año 2008 referidos a Castilla-La Mancha son una mala noticia para la región, especialmente para aquellos ciudadanos y ciudadanas que han pasado a formar parte de las listas del paro.
Según estos datos Castilla-La Mancha se encuentra entre las primeras regiones con peores estadísticas laborales, supera las medias nacionales porcentuales en destrucción de empleo y tasas de actividad, manifestando la ineficacia e insuficiencia de las medidas tomadas hasta el momento –meros parches-, por el gobierno Barreda, contra la crisis y la recesión económica. Un ejecutivo que ha pasado de ser un equipo para combatir la crisis a estar en plena crisis.
La referida encuesta indica que somos:
- La cuarta comunidad autónoma donde más ha crecido porcentualmente el número de parados. En el último año el número de desempleados ha crecido en más 70.300, lo que supone un aumento del 95,50 %, solo por debajo de Canarias, Cantabria y Murcia y un crecimiento del paro casi del 30% por encima de la media nacional.
- La tasa de actividad en Castilla-La Mancha se sitúa en el 57,33%, casi un 3% menos que el resto del Estado.
- La tasa de paro se sitúa en el 14,9%, somos la quinta comunidad autónoma con la tasa de paro más alta (sin contar Ceuta y Melilla) y estamos un punto por encima de la media nacional cifrada en un 13,91%.
- Somos la cuarta Comunidad Autónoma con mayor tasa de paro femenino, un 17,52%. En cuanto a tasa de ocupación femenino somos la tercera comunidad con el porcentaje más bajo, solo un 45,85% de las mujeres en Castilla-La Mancha aparecen como “ocupadas”; casi seis puntos por debajo de la media.
- La tasa de paro masculino se sitúa en el 13,18%, también por encima de la media nacional del 12,96%.
Estas cifras desmedidas de crecimiento del paro durante el último año, en el que se ha doblado el número de desempleados, estadística sin precedentes en nuestra región, debería hacer que el Gobierno regional rectifique sus políticas y adopte medidas mucho más ambiciosas para salir de la crisis, principalmente abordando un nuevo plan de vivienda, elaborando un verdadero Plan de Acción Local para los Ayuntamientos, con suficiente y adecuada financiación y apueste de una vez por todas por la formación y nuevos sectores productivos de la economía.
Según estos datos Castilla-La Mancha se encuentra entre las primeras regiones con peores estadísticas laborales, supera las medias nacionales porcentuales en destrucción de empleo y tasas de actividad, manifestando la ineficacia e insuficiencia de las medidas tomadas hasta el momento –meros parches-, por el gobierno Barreda, contra la crisis y la recesión económica. Un ejecutivo que ha pasado de ser un equipo para combatir la crisis a estar en plena crisis.
La referida encuesta indica que somos:
- La cuarta comunidad autónoma donde más ha crecido porcentualmente el número de parados. En el último año el número de desempleados ha crecido en más 70.300, lo que supone un aumento del 95,50 %, solo por debajo de Canarias, Cantabria y Murcia y un crecimiento del paro casi del 30% por encima de la media nacional.
- La tasa de actividad en Castilla-La Mancha se sitúa en el 57,33%, casi un 3% menos que el resto del Estado.
- La tasa de paro se sitúa en el 14,9%, somos la quinta comunidad autónoma con la tasa de paro más alta (sin contar Ceuta y Melilla) y estamos un punto por encima de la media nacional cifrada en un 13,91%.
- Somos la cuarta Comunidad Autónoma con mayor tasa de paro femenino, un 17,52%. En cuanto a tasa de ocupación femenino somos la tercera comunidad con el porcentaje más bajo, solo un 45,85% de las mujeres en Castilla-La Mancha aparecen como “ocupadas”; casi seis puntos por debajo de la media.
- La tasa de paro masculino se sitúa en el 13,18%, también por encima de la media nacional del 12,96%.
Estas cifras desmedidas de crecimiento del paro durante el último año, en el que se ha doblado el número de desempleados, estadística sin precedentes en nuestra región, debería hacer que el Gobierno regional rectifique sus políticas y adopte medidas mucho más ambiciosas para salir de la crisis, principalmente abordando un nuevo plan de vivienda, elaborando un verdadero Plan de Acción Local para los Ayuntamientos, con suficiente y adecuada financiación y apueste de una vez por todas por la formación y nuevos sectores productivos de la economía.
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