Page ha
ofrecido a Cospedal,
un pacto para que ningún familiar de ellos se siente en consejos de
administración de empresas públicas, lo que algunos medios han denominado pacto antienchufismo familiar. El PP
está dispuesto a “pactar que nunca se pueda meter a familiares fraudulentamente
o falsificando currículum en la Administración pública".
Conclusión, para el PSOE de CLM el compromiso debe ceñirse a “controlar”
el enchufe de familiares en consejos de administración de empresas públicas, en
lo demás, “ancha es Castilla”, y el PP dispara por elevación, no solo parece dar
por buenas indirectamente dichas prácticas, sino que además reconoce la
existencia de falsificaciones de currículum para enchufar en la administración….
en general.
Con la que está cayendo, ni transparencia, ni ética, ni
dignidad, ni igualdad de oportunidades, ni respeto a la legalidad, y sobre todo
una falta de respeto absoluto a los ciudadanos. Es una prueba más de que no
todos los políticos son iguales, ni que el problema es la política, son algunos
políticos y sus prácticas. Es curioso que quien acoge y mantiene dentro de sus
filas, incluso con importantes responsabilidades, a personas que se dedican a
la política por interés personal o ajeno al público, que hacen de su capa un
sayo, ya sea con la legalidad o cualquier otro principio ético de la gestión de
los cargos públicos, resultan protegidos y usados como acicate con la propia
política. La corrupción, las malas prácticas, las gestiones desastrosas y los
privilegios son y han sido prácticas protegidas por el bipartidismo y las leyes
que sus mayorías absolutas les han permitido elaborar o mantener. Por eso ahora
resulta especialmente frustrante que esos mismos, los que han permitido y
permiten los desmanes de unos pocos, hagan uso del descrédito político, que
ellos mismos han generado y sostenido, para limitar la Democracia. Es decir, se
está utilizando la mala imagen que ellos mismos han creado de los políticos
para sacar tajada, limitar la política de los electos, dejar en manos de una
más que reducida oligarquía la posibilidad de hacer uso efectivo del derecho de
sufragio pasivo, a la vez que se multiplica el número de políticos puestos o
elegidos a dedo. A saber: “Siempre estaré detrás de ti, o delante, a un lado…”.
Si a todo ello unimos el afán de los dos grandes partidos por
cambiar las reglas de juego electorales con el único fin de mantenerse en el
poder, y la decisión de Cospedal de reducir a la mitad el número de diputados,
de políticos elegidos por los ciudadanos, y aumentar exponencialmente los
elegidos a dedo en el Gobierno regional, queda más que constatado que en la
región vivimos una Democracia de apariencias y muy limitada, se reduce casi
exclusivamente a votar cada cuatro años. Dicen en el PP que quieren hacer de
las Cortes de Castilla-La Mancha el parlamento más austero, es decir, hasta el
modelo de Estado, hasta la calidad democrática, se mide por razones de
rentabilidad económica, sin embargo recortar en Democracia sale siempre muy
caro.
Para Izquierda Unida de Castilla-La Mancha es fundamental
adoptar un compromiso, trasladado al Diario Oficial de Castilla-La Mancha, de
plena transparencia, comportamiento ético y participación ciudadana en todas
las actividades y decisiones de la administración regional y de los organismos
y entidades que la integran.
Mientras el PP y el PSOE en
Castilla-La Mancha, demuestran reiteradamente estar muy preocupados por
mantener sus espacios de poder o chiringuitos al margen del control
democrático, desde Izquierda Unida tenemos un objetivo claro e ineludible,
adecuar la composición de las instituciones representativas a la voluntad
popular, expresada a través de sus votos, pero además resulta imprescindible impulsar
una regeneración o democratización institucional, política y social de
Castilla-La Mancha, considerando para ello la creación, o mejora en su caso, de
mecanismos de participación ciudadana y de transparencia en la gestión pública.
Instamos tanto
al Partido Popular como al PSOE, siempre con la necesidad de contar con agentes
sociales de referencia para toda la región, a negociar y adquirir una serie de
compromisos, por la regeneración democrática e institucional, la transparencia
en la gestión pública y el comportamiento ético de los cargos públicos y
responsables políticos. Lo demás, medidas como reducir el número de diputados
manteniendo un sistema electoral injusto y dejarlos sin sueldo, es precisamente
procurar que sean los corruptos, enchufados, los puestos a dedo, y los de “siempre estaré...”, los únicos que estarán, casi en solitario, en la vida política.
Daniel Martínez, Coordinador Regional IU Castilla-La Mancha